¿Solidarias o Egoistas de la moda?

La firma de moda femenina Flamenco acaba de abrir un año más su mercadillo solidario. Con descuentos de hasta el 90% en los llamados "superchollos" y con grandes rebajas en todo tipo de prendas, incluidas las infantiles, bolsos, pareos, pañuelos, etc.
En esta ocasión es en Los Teatros del Canal, desde las 10 de la mañana a las 21 horas y hasta el día 9 de mayo. Lo mejor es que no por ir mañana, pasado o el último día te quedarás sin nada, pues sacarán novedades constantemente.



Una servidora pudo acudir esta mañana a primerísima hora a cubrir el evento. En cuanto llegué, la cola y el viento frío de Madrid me sacudieron la cara. Desde la puerta de los teatros una fila de mujeres gritaba que abriesen las puertas. 10.01 horas.
Cuando se abrieron, como por arte de magia la cola fue desaparenciendo para convertirse en una carrera por ser la primera en entrar y coger los chollos que aún cuelgan (sin saber lo que les espera) de los percheros ordenados y tranquilos, por poco tiempo.
"Esto es una barbaridad" decía una señora que había acudido a este mercadillo en otras ocasiones. Las flores y el colorido característico de la marca había conseguido congregar en un espacio de dos plantas (la superior, más pequeña para la ropa de niña-todo a 14.99€-) a cientos de personas.
En menos de una hora, ya había percheros vacíos. Menos mal que pusieron música, para amansar las fieras un poco de Alejandro Sanz, Alejandro Fernández y creo que sonó hasta algo de Julio Iglesias. No era de extrañar la actividad frenética del mercadillo, pues la práctica habitual es ir cogiendo prendas a destajo y ya luego soltarás las que descartes. El único problema: no había probadores. Pero la solución fue rápida, en los rellanos de las escaleras y en cualquier hueco un poco escondido podías encontrarte improvisados probadores llenos de mujeres medio desnudas probándose un vestido, una camisa, un pantalón, o todo a la vez.
Andar por los pasillos era una odisea, las perchas que cargaban las señoras se te enganchaban en la ropa, en el bolso... No engaño si digo que vi codazos, empujones y miradas asesinas.
La mayoría de las asistentes eran mujeres de mediana edad, pero también había chicas jóvenes, incluso madres con bebés, ¡Qué valor! No faltaban unos cuantos maridos o acompañantes despistados que se preguntaban qué carajo habían hecho mal para acabar en ese infierno.
Me crucé con uno al que apenas se le veía por la montaña de ropa que aguantaba mientras cogía sitio en la cola para pagar, ¿su mujer? seguía mirando más prendas. Otro perdido entre tanta percha y mujer desconocida, le vi resbalar por la mejilla una lágrima de desesperación mientras buscaba a su mujer entre faldas a 14,99€ y que antes costaban 89,99€.

Lo mejor de todo fue cuando ya esperaba tranquilamente en la cola para pagar y dos señoras se nos acercaron, a mi amiga y a mí, para ofrecernos colarse y a cambio pagarnos una camiseta a cada una. Nos miramos con una mezcla de sorpresa e incredulidad para decir prácticamente a coro que ¡por supuesto! Si es que con el dinero una puede llegar a todas partes, y si estas señoras no querían esperar cola ¿por qué iban a tener que hacerlo?
Al salir nos sentimos un poco "prostitutas de la moda", pero al fin y al cabo, salí más feliz que una perdiz con una camiseta y un bolso de marca habiendo pagado 2,99€. Y lo mejor de todo la bolsa que te dan, que es una preciosidad digno diseño de Flamenco.



Toda una experiencia este mercadillo solidario de Flamenco, recomendable para las amantes de los bordados, los estampados florales y coloridos, los vestidos veraniegos que presentan son muy ponibles, pero también tiene una colección con zapatos y prendas más arregladas, foulards, bolsos y complementos que llamarán tu atención seguro.
La solidaridad del mercadillo se contrapone a la desesperación por el chollo que ha supuesto la crisis económica para las consumidoras de ropa de marca. La bajada de las ventas en el sector textil hace que iniciativas como éstas tengan un éxito así de rotundo y que más que sentirse una bien por haber colaborado con una buena causa sale contenta por haberse llevado la última talla M del vestido floral turquesa que más ha triunfado en el mercadillo.
¿Solidaridad o Egoísmo?
En cualquier caso, aquí ganamos todos. La firma por vender todo el stock, las clientas por los chollos y las organizaciones solidarias por captar fondos.


Fotos: Nerea Pita y Rocío Ponce